jueves, 15 de abril de 2010

Crónica de una muerte anunciada

Como quien vuelve, pero mejor se va...

Una vez más mi madre tenía razón. Me compro justo y después me queda chico. No hay nada que hacer, su sabiduría recorre mis venas y por más que lo intente, llego siempre al puerto que ella había visto antes que yo. Creer o reventar.

Por eso, amados/as lectores, hoy vengo a decirles que lo que se suponía que pasaría. Este blog muere aquí. ¡Momento! No es para llorar, porque resucita en otro.

Mi necesidad de escritura sigue intacta, pero ya no tiene sólo que ver con mi hijo o la espera de él, sino con mi vida entera.

Por eso, en honor a las palabras de mi “santa” madre, los invito a:

Escribir o Reventar
(http://www.escribiroreventar.blogspot.com/)

La Amarga Espera y otro blog aún más antiguo que éste, escrito con nombre y apellido, se unen en uno sólo que a partir de ahora me representa mejor. Espero que mi resurrección en este nuevo espacio no sea castigada con el olvido. De corazón, los espero allí. Y ...GRACIAS por haber estado aquí.